Va a ser difícil de entender que los libros de historia que estudien dentro de unos años nuestros hijos y nietos, digan que un Ayuntamiento como el de Pontevedra votaba un 24 de febrero de 2016 para declarar“persona non grata” al presidente del gobierno de España Mariano Rajoy, ciudad donde además se crió comenzando su carrera política como concejal y meses después, un 29 de abril de 2017, el mismo ayuntamiento hiciera un homenaje al dictador comunista Fidel Castro con la presencia de ilustres personajes e intelectuales como Willy Toledo.

Los libros de historia contaban que “La decisión de declarar persona “non grata” a un vecino del pueblo que llegó a ser presidente del gobierno de España y sacar a este país de la mayor crisis de su historia, fue la decisión de mantener la empresa de celulosa «Ence» sobre una parcela del litoral público donde se encuentra, comprometiéndose dicha empresa a invertir 60 millones de euros para control de contaminación de agua. En este empresa hay casi 400 personas que trabajan directamente, y otras 5.000 cuyos únicos ingresos dependen de ella”, pero esto probablemente serán datos sin importancia para los regidores del ayuntamiento de Pontevedra.

El «Homenaxe Nacional a Fidel Castro» estará organizado, por la izquierda nacionalista y con la intervención entre otros y de forma destacada de Willy Toledo, y del Alcalde de Pontevedra Miguel A. Fernández Lores (BNG), que según indican los carteles participará en calidad de “alcalde” y por lo tanto de representante de todos los vecinos de Pontevedra. No me gustaría ser vecino de Pontevedra y que en mi nombre este señor fuera homenajear a un dictador…

El acto tiene lugar además después de que los partidos organizadores firmaran hace 2 semanas un manifiesto en apoyo de la represión de Nicolás Maduro.

Pontevedra, una ciudad tan bella, como ningún otro pueblo de España, merecen un Alcalde que aplauda a dictadores y desprecie a los demócratas.