Cuando un partido va a votar por tener un Lider, es que nadie lidera ese partido.

La democracia siempre es sana pero en un partido político, igual que en otras situaciones de la vida, cuando un verdadero Lider está generando un proyecto, nadie se plantea que haya que votar al Lider, por que lo importante es el proyecto, las ideas, y no las personas que lo conduzcan.

Además ocurre que en los grandes partidos, como en los grandes clubs deportivos, suelen haber varios Líderes, todos con la meta común de que gane el club o el partido, demostrando además las cualidades personales de cada individuo de forma humanamente egoista.

Cuando un Partido Político se mete en una dinámica de elegir al «jugador» que lleve el peso del equipo, lo que suele pasar es una situación engorrosa donde todos los líderes con aptitudes se dedican a empujar literalmente unos a otros para ser ellos los elegidos, con el resultado final de perdida del partido y enfado de los no elegidos.

El Partido Popular no necesita como el PSOE una votación para la elección del Líder, porque ya lo tenemos y creemos en que Él nos va a hacer ganar este difícil partido en el que estamos metidos; Lo que necesita el Partido Popular es que los Políticos con cargos no lo sean como si tuvieran una profesión VITALICIA porque la representación de los ciudadanos está comprobado que agota, desgasta o corrompe, y la gente no debe estar más de 2 o 3 legislaturas en un mismo sillón, porque lo que no hayas hecho en ese tiempo, difícilmente lo harás después.

Los ciudadanos tienen la sensación, y así nos lo dicen, que siempre son los mismos en los sillones, y que cuando se levantan de un sillón simplemente es para cambiarse de sitio y ir a postrarse en otro de características y privilegios similares en otra institución que pagaremos entre todos.

La renovación de los cargos públicos es el mayor problema que tiene el Partido Popular, donde damos la sensación de tener las puertas cerradas a los cambios y a las personas que los puedan realizar.

Necesitamos abrir bien puertas y ventanas, dejar que los nuevos aires y personas preparadas vengan a ayudar a ganar este partido en el que estamos jugando mejor, pero todavía no hemos marcado el gol que nos de la victoria.